jueves, 27 de marzo de 2014

A Garden Journal

Hoy un post bonito, delicado y dedicado.
Prima, va por ti.

Deberias de hacer uno, un diario de tu huerto. De lo que plantas, de lo que recoges, de cuando sale, del tiempo que hizo aquel año, de las semillas... Anda, pásale el post a los chicos que te veo que has hecho un Encarna.

A garden journal... si, si, en inglés que me gusta más. Que bonito, pero no uno cualquiera, no, no, uno delicado e inspirador como este que os voy a enseñar hoy.

¿Y cómo lo hacemos? Queridos, lapiceros preparados.
Empieza la clase.


Necesitamos : • Diario
• Pegamento
• Celo o Washi Tape
• Tijeras
• Las semillas de plantas
• Lápices de colores
• Pluma o punta fina.
 

Paso 1 : Dibujamos el diseño del jardín. Agrupación de las jardineras y pequeños botes. 
Todo vale .
 

Paso 2 : Hacer fotos de sus plantas de jardín o, incluir en las páginas bonitas imagenes que podemos encontrar en sitios como Instagram o Pinterest.


Paso 3 : Cinta o pegamento. Cualquier paquete de semillas o estacas de plantas que hayas guardado.  Incluyendo información acerca de la luz y las condiciones del suelo. Anota tus propias calificaciones, realizar un seguimiento de lo que lo hizo bien, lo que necesita mejorar y si piensas que podría crear un espacio nuevo.

Paso 4 : Seguir añadiendo al diario durante toda la temporada e ideas para las distintas estaciones.



Porque, yo no lo sabía, nunca me lo había planteado... ¿qué hacemos con las semillas? ¿donde las guardamos en otoño? ¿las intercambiamos entre otros amigos como nosotros?




Sobres de semillas clásicos con espacios para registrar la variedad tipo de semilla, Fecha de recolección y notas.



Con opción de catalogar semillas orgánicas, herencia, híbrida, de polinización abierta, de polinización a mano, y/o perenne.




Oi, oi, oi, oi...
Que bonito.
 
Ya solo nos falta la primavera... que menudo frio leñe.
 
 


miércoles, 26 de marzo de 2014

Curriculum Vitae llenos de esperanza

El otro día un amigo, que no lleva mucho tiempo en paro, me dijo que había mandado más de 900 curriculum en apenas tres meses, y me alarmé.
Me imaginé a tantísima gente que está parada mandando CV, y a la vez me imaginé pilas y pilas de folios con miles de datos laborales que caen en el olvido. Imagino que la gente pierde la esperanza de seguir, de buscar, de trabajar... gente de su padre y de su madre, con familias, sin familias, jovenes prepearados, jovenes no tan preparados, no tan jovenes, nada nada de jovenes... gente de 60 años...

Hoy os contaré otra historia, la de mi padre. Mi padre, era chapista de coches. Trabajaba en un concesionario Renault, de los grandes, de los "wuenos", un concesionario de renombre. Y... un día... llegó "el jefe" y dijo... lo vendo, lo vendo todo.
Hablamos de hace unos años, de cuando todo iba viento en popa y a toda vela y eramos reyes.
Todos estaban contentos, todos aplaudían y festejaban que se quitaban de en medio aquel viejo raro y gruñon y les compraban gente joven y con aires nuevos y modernos.
Pero las personas que compraron aquel imperio, dijeron que se quedaban con todo y con todos los trabajadores salvo aquellos que superaran los 55 años. Mi padre tenía 59.
Gente de negocios, que algún día tendrán ellos más de 55 años, que su padre y que su madre habrán tenido más de 55 años y que sus hijos algún día tendrán más de 55 años. La gente es taaaaan idiota...

Venga, tranquilos, no es una historia triste, todo lo contrario.
Total, que el jefe viejo, raro, roñoso y gruñon dijo "Yo me quedo con los 4 que superan esa edad, no hay problema". "El jefe" que era como le llamaba mi padre, se montó un tallercillo humilde donde arreglaba los coches de sus amistades, restauraba y remozaba su graaan colección de coches antiguos y tenía sus trastos y sus coches con los que corría sus carreras en el Jarama, si, si, el viejo raro y roñoso corría rallyes.

Y me hacía gracia porque mi padre era feliz, mi padre un día estaba pegándole martillazos a un coche de principios de siglo XX, otro día estaba podando los laures de la casa de "el jefe" y otro día me decía "Hoy vamos primero a Carrefour a comprar unas cervezas, aceitunas y cosas para comer, porque mañana vamos todo el día al Jarama que "el jefe" tiene carreras."

Por favor, que nunca nadie pierda la esperanza, que no deje que se la arrebaten, que nadie se apodere de ella.














Cuando mi padre finalmente se jubiló, "el jefe" el viejo raro, roñoso y gruñon, le regaló, como hizo con el resto de los mayores de 55, un reloj suizo (porque tenía cuentas en suiza y ya el hombre aprovechaba) un reloj suizo colección limitada nosecuantitos, con una inscripción por detrás "Gracias por tus años de servicio".

Lamentablemente, los menores de 55 años no corrieron la misma suerte. Un año después de la compra llegó la "crisis" y con ella tuvieron que cerrar.



jueves, 20 de marzo de 2014

Harper y Lola

Hoy el post se lo quiero dedicar a mi bulldog inglés favorito, Rocco.
En el voy a contaros la bonita historia de una preciosa bulldog llamada Lola y de su "hermana" Harper.

Sentaros. Atentos, queridos. Los de la última fila... siempre son los mismos...

Erase una vez una fotógrafa profesional llamada Rebecca Leimbach. Rebecca y su marido estuvieron mucho tiempo intentendo tener niños. Tras duros años y muchos tratamientos finalmente llegó Harper, una preciosa niña. Pero por desgracia con ella llegó la confirmación de que sería su única hija biológica.
Rebecca se sentía culpable de no poder dar un hermanito a Harper. Se sentía culpable de no poder darla un compañero de juegos, alguien que la protegiera, que jugara con ella.

Pero un día Lola, su adorable bulldog inglés, apareció por el salón vestida de princesa y Rebecca se dió cuenta que Harper ya tenía ese compañero a su lado, desde el principio, desde que ella llegó a casa.





Harper ama inmensamente a Lola... excepto cuando se come sus juguetes... algo que sucede muy a menudo.
Lola es muy protectora con Harper, sea lo que sea que ella esté haciendo Lola tiene que dar el visto bueno, ella investiga con su magnífico sentido protector canino que aquello es seguro, como si se tratara de uno de sus cachorros.

Rebecca Leimbach ha ido fotografiando esta bonita y floreciente relación entre la niña y la bulldog inglés. Con ello quiere que la gente vea como la relación entre los animales y las personas pueden llegar a dar forma a nuestras vidas.
Aquí os dejo estas fotografías de dos compañeras de juego.

 
















Las fotografías de Leimbach, son muestra cálida y profesional, de una preciosa historia de amor y de amistad de estas hermanas.
Harper y Lola.
 
 

martes, 18 de marzo de 2014

Mi regalo de cumpleaños

Dentro de un mes será mi cumpleaños.
Y llevo ya años dándole vueltas a un regalo que quiero. En serio, no quiero más, con eso me conformo, es más, es baratísimo y es lo que quiero.
Quiero un fin de semana sola en casa, yo conmigo misma, sin salir de casa, sin llamadas de teléfono, aislada.
Si... quiero eso... llamarme rara, pero quiero estar soooolaaaa.

El caso es que me da cosa pedirselo a mi marido, porque claro el tema es... estoy hasta el moño de vosotros, de no tener inspiración, soledad, relajación, contemplación, quiero poner lo que me da la gana en la tele cuando a mi me de la gana, quiero estar en la cama hasta las tres de la tarde, quiero no quitarme el pijama ni la coleta en todo el finde, quiero que os vayais a Paarrrlaaaaaaaaa¡¡¡¡
Todos, los niños y tú, a casa de tu madre (para garantizarme que los niños comen y cenan). Y no quiero llamadas, no quiero que nadie me llame para preguntarme cosas como ¿cuanto le doy de Apiretal? ¿Y los calcetines del niño dónde están?
Quiero llegar el viernes a casa y que no haya nadie. Y que vuelvan el domingo a las 8:30, cenados y bañados y listos para meterse en la cama. Y que se vayan y vengan en patinete, porque yo no voy a por nadie.

Quiero eso. Y lo quiero dicho así, porque si, porque me apetece decirlo así y quedarme agusto.
Y claro... tampoco se lo merecen. Entenderme. Que los quiero un huevo y son mi vida y más. Es por ello por lo que me parece muy heavy metal decirselo así. Pero es así como quiero decirlo para quedarme como Dios.

El caso es que a mi me dicen eso así y no se yo muy bien como reaccionaría. Que no me parece justo... pero... hijos mios, me apetece.


 
Yo, quiero.

 
Y lo quiero decir así, como lo siento.
 
 
Y no hacer nada, simplemente disfrutar de mi soledad.

 
Coger un poco la cámara.


Leer a pierna suelta

 
Meditar


Hojear y ojear.

 
Si me viene en gana hacer el pino.

 
Mancharme.

 
Tallarme un poco el alma.
 
Gracias a Miss Marple que hoy ha comentado que la soledad es necesaria para crear , imaginar y disfrutar de muchas cosas más. Y ha puesto una frase de una frase de Erica Jong que me ha encantado.
 
"Estamos destruyendo la capacidad de disfrutar de la soledad"
 


viernes, 14 de marzo de 2014

Mi pequeño zorrillo

Siempre he hecho planes pensando en ella, en mi hija mayor.
Sé que he creado un monstruo... la gusta más los saraos que al Chuli, al Pai y al Cabra.
Desde muy pequeña siempre ha sido una pequeña Lola Flores, hemos ido a fiestas, talleres, museos, eventos de todo tipo... y allí estaba yo dándola las palmas.

Y llegó Guille. Y yo dije aquí tenemos al Pescailla a la guitarra. Y no, él es distinto. El es más familiar, es más de cumpleaños (le encantan), de primos, de amigos, de ir a casa de la madrina, del primo, de que vengan a su casa... A Guille no le gustan las aglomeraciones, los bullicios, el gentío... vamos que él va a Cortylandia y dice que se quiere ir a casa e Itziar si puede se sube al escenario.

Ellos, mis hijos, son muy distintos. Y este finde de semana, es para él.
Ella no lo va a entender. Porque es mujer y porque yo creo que es la primera vez que pasa.

Este fin de semana me llevo a mi zorrillo a jugar con un duende, los dos, allí con sus cars, con sus aviones y sus cosas de chicos. Y el domingo tiene un cumpleaños al que Itziar no está invitada porque es de chicos y punto.

Este finde será el prota. Será su finde. Se lo recochineará a su hermana... y la tendremos.
Es más lindo mi zorrillo.



 






Pobre mi princesa, un finde en casa metida con papá viendo futbol y más futbol y ella estudia que te estudia.
Como tengo corazón, esta tarde vamos al cine.
Angelito mio. Todavía no se lo he dicho.
Ya os contaré.